La met Gala 2025
- Luz Naomi González Ponce
- 8 may
- 2 Min. de lectura
EL DIARIO DE LA MODA
08 de mayo, 2025
La sastrería no es solo una técnica de confección; es una forma de expresión poderosa, meticulosa y profundamente personal. A lo largo de la historia, la ropa hecha a medida ha sido símbolo de estatus, elegancia y pertenencia cultural. Este 2025, la Met Gala nos invita a redescubrir su relevancia a través de un homenaje que mezcla historia, moda y orgullo identitario: Superfine: Tailoring Black Style es el nombre de la exposición del Costume Institute, y el código de vestimenta "Tailored for You" celebra la herencia de la sastrería negra y su impacto en la moda global.
Este año, muchas celebridades han optado por reinterpretaciones de trajes clásicos, siluetas estructuradas y detalles meticulosos que evocan la tradición de la alta sastrería. En especial, se ha destacado la sastrería negra como centro de una conversación más amplia sobre estilo, identidad y resistencia. La alfombra de este año se tiñó de looks que fusionaron costura, arte y narrativa personal: trajes intervenidos con encaje, tejidos bordados a mano y cortes impecables que hablaban de historias más allá del diseño.
¿Por qué sigue siendo tan importante la sastrería? Porque representa vestir con intención. En un mundo saturado de prendas desechables y tendencias efímeras, una pieza hecha a medida no solo te queda bien: te representa.
Cinco formas de llevar la sastrería con estilo propio:
Apuesta por lo clásico, pero dale tu giro: Un blazer oversize con shorts o una camisa sastre en lino de color inesperado.
Ajusta lo que ya tienes: A veces, un buen sastre hace más por tu armario que una tarde de shopping.
Explora tu identidad con las telas: Lana fría, lino, algodón, jacquard… cada textura cuenta algo de ti.
Juega con lo andrógino: La sastrería no tiene género, solo actitud.
Hazlo personal: Detalles como un forro estampado o botones únicos transforman un básico en una pieza statement.
La Met lo confirma: la sastrería está más viva que nunca… y es hora de vestir con propósito.
Por: Luz Naomí
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